El Manejo Agronómico De La Lechosa, Y Sus 4 Actividades Principales
El Manejo Agronómico De La Lechosa consiste en todas aquellas actividades agrícolas realizadas en campo, con el fin de lograr el desarrollo exitoso de la planta de lechosa. Existen actividades primordiales para lograr con éxito la cosecha. Tales actividades las mencionaremos a continuación.
1. Sistemas y densidad de plantación
La lechosa puede ser plantada en marco real, rectangular, tresbolillo y en hileras simples o dobles. La distancia entre plantas y entre hileras varía en las diferentes regiones productoras. Hay países donde es común distancias de 2-3 m entre plantas y 3-4 entre hileras. En regiones con mayor tecnología se utilizan distancias entre plantas, de 1,5-2 m; usando hileras dobles.
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2. La Fertilización
La lechosa es una planta de rápido y continuo crecimiento; por lo que la fertilización debe ser realizada de manera frecuente; dependiendo por supuesto de las características de clima y suelo. Por lo general, la fertilización se realiza cada 2-3 meses, incorporando el fertilizante al suelo; para un mejor aprovechamiento de los nutrimentos. Se ha señalado que una tonelada de frutos extrae 1,77 kg N – 0,22 kg P – 2,12 kg K – 0,35 kg Ca y 0,18 kg Mg.
Uno de los criterios más utilizados para el establecimiento de planes de fertilización es el análisis del estado nutricional de la planta; en este sentido, se ha determinado que el pecíolo de la hoja recientemente madura es el mejor tejido para realizar los análisis de nutrimentos.
3. La Propagación
Tal como hemos mencionado en anteriores oportunidades, la lechosa puede ser propagada por vía sexual y asexual; utilizando estacas o injertación. Sin embargo, desde el punto de vista comercial, este último método no tienen utilidad, por la incapacidad de la planta de producir yemas en abundancia. La planta, bajo condiciones normales no ramifica y si se induce la ramificación, por poda, el número de puntos de crecimiento sería limitado. La propagación comercial de la lechosa se realiza por semillas.
4. El Sexado
Cuando se utilizan semillas de origen desconocido y se llevan tres plantas por punto, es necesario realizar la práctica de sexado. Esta se realiza cuando ocurre la floración (3-5 meses después del trasplante, según el genotipo), eliminando 2 plantas por punto de siembra para dejar una sola, la cual deberá ser productora de frutos, preferiblemente andromonoica (hermafrodita). En caso de observarse gran cantidad de plantas femeninas, es conveniente dejar plantas masculinas (10% de la población femenina) en la plantación a fin de asegurar la polinización. La eliminación se hace cortando la planta al ras del suelo con un cuchillo filoso; las plantas cortadas deben ser eliminadas de la plantación.
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Otros 5 aspectos de suma importancia
1. El Clima Ideal En El Manejo Agronómico De La Lechosa
La lechosa es una planta tropical que comercialmente se adapta a menos de 1000 msnm. En regiones subtropicales su ciclo se alarga y en épocas frías el fruto producido es de mala calidad. Las principales regiones productoras se ubican entre los 23º de latitud N y S; sin embargo su cultivo se ha extendido a zonas más allá de los 32º LN y S, desarrollándose mejor entre 0 y 300 msnm.
La temperatura óptima para su cultivo oscila entre 21 y 33 °C. No tolera temperaturas de 0°C. Cuando ocurren temperaturas menores de 12 °C hay retraso en el crecimiento y en el desarrollo de las yemas florales, caída de hojas y flores, menor producción y frutos con menor contenido de azúcares. Las temperaturas altas, mayores de 43°C, son indeseables. Se ha reportado un requerimiento mínimo de 66% de humedad relativa. Una alta humedad relativa ocasiona problemas con enfermedades fungosas y bacterianas; si es baja habrá excesiva transpiración.
Por su constitución herbácea y alta producción, no soporta fuertes vientos; éstos pueden provocar el desprendimiento de las hojas reduciendo el área foliar y consecuentemente la capacidad fotosintética, además de exponer los frutos a la exposición directa de los rayos del sol lo cual puede causarles quemaduras. Por otro lado, las plantas desarrolladas bajo sombra son débiles, con poca producción y frutos de baja calidad. En cuando al fotoperíodo, no se han reportado efectos sobre el desarrollo.
2. El Suelo
El Manejo Agronómico De La Lechosa exige suelos con buen drenaje, por lo tanto deben evitarse suelos muy arcillosos o con problemas de compactación, sujetos a inundación. Un suelo inundado por 2 días causa severos daños a la planta, siendo muy difícil su recuperación.
Crece bien a pH entre 5,5 y 7,0; en suelos con menos de 5,0, el crecimiento de las plantas jóvenes es pobre y se observa una alta mortalidad; con valores entre 5,0 y 5,5, se recomienda el encalado para incrementar tanto el crecimiento como los rendimientos. No se recomiendan suelos salinos; aún cuando su tolerancia a la salinidad puede ser variable; en las etapas de germinación y en los estados iniciales de desarrollo de las plántulas la tolerancia es menor.
3. El Riego
Debe ser una práctica usual, en lugares con deficiencia hídrica acentuada, debido a la elevada exigencia de agua por parte de este cultivo. Es muy común la utilización de riego por gravedad, siendo conveniente la colocación de tapas para un mejor humedecimiento del terreno, pero evitando el encharcamiento al pie de la planta. También es utilizado el riego por aspersión, preferiblemente subarbóreo para evitar problemas con enfermedades de tipo fungoso y bacteriano. El riego por goteo es recomendado, principalmente en plantaciones con alta tecnificación donde es factible la fertirrigación.
4. El control de malezas
El control de las malezas se realiza por medios manuales, mecánicos (entre las hileras) y químicos. Es importante el control manual al pie de las plantas, principalmente en los primeros tres meses de la plantación, ya que no existe otro método efectivo que permita la eliminación de las malezas. Entre las hileras se recomienda el uso de segadora rotativa, evitando la utilización de rastra que podría dañar al sistema radical en plantaciones establecidas.
Para el control químico se utilizan comúnmente, paraquat y glifosato, evitando el contacto con la planta dada la susceptibilidad de la lechosa a muchos productos químicos. El control de las malezas en muy importante, no solo por la competencia que se genera entre estas plantas y el cultivo, sino por ser también hospederas de insectos transmisores del virus de la mancha anillada.
5. La cosecha
La cosecha se inicia entre los 9 y 12 meses después del trasplante y se realiza cada 2-3 días, ya que la planta está en continua producción. Los frutos se deben cosechar manualmente, ejerciendo una leve presión sobre el pedúnculo. El índice de cosecha se corresponde con un cambio de verde oscuro a verde claro y la aparición de líneas o regiones de color amarillo en el epicarpio.
El nivel de coloración adecuado para una completa maduración del fruto variará de acuerdo con el cultivar. El cambio de color del epicarpio de verde a amarillo o anaranjado se debe a la destrucción de la clorofila y desarrollo de los carotenoides. La lechosa es un fruto climatérico; durante la maduración, la tasa de respiración del fruto aumenta rápidamente, alcanzando su máximo en plena maduración.
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¡Y por último, un dato muy importante!
En El Manejo Agronómico De La Lechosa, también es importante saber que un cultivar puede se puede perder en pocas generaciones si no se tiene el cuidado de mantener lotes de producción de semilla pura, debido a las múltiples combinaciones florales que pueden ocurrir, a la complejidad del sexo y a la facilidad de cruzamiento. Como se indicó anteriormente, esta especie es sensible a los cambios ambientales y los cultivares que se desarrollan bien en una región posiblemente no se adapten bien a otra similar, por los pequeños cambios que se producen en el ambiente.
