5 Pasos Para Sembrar Y Cosechar El Tomate.
El cultivo de las Semillas De Tomate es una disciplina muy practicada por los agricultores en todo el mundo. Esta semilla es muy conocida también con el nombre científico de Lycopersicum Esculentum y pertenece a la familia de las Solanacea. Por lo general sus frutos se cosechan verdes para el consumo humano y tiene un lugar muy destacado dentro de la línea de las verduras.
Esto se debe más que todo a que se utiliza para la elaboración de pasta de tomate para ser añadidos a distintos platos culinarios por su buen sabor y el gusto inigualable que lo identifica. Para que esta ricura pueda ser disfrutada y el fruto del tomate pueda ser materializado, se requiere de ciertos procedimientos importantes para su producción.
A continuación, explicaremos paso a paso el procedimiento que se le debe aplicar a las Semillas De Tomate para poder ser plantadas y posteriormente cosechado su fruto.
¿Cómo Plantar Las Semillas De Tomate ?
¿Deseas plantar algunas Semillas De Tomate ? Puedes usar algunos tomates sanos de los que tienes a la mano en tu cocina y con esto bastara para que hagas crecer unas cuantas plantas en tu jardín. Lo único que debes hacer es estudiar el proceso que describiremos a continuación para saber cómo cultivar los tomates, bien sea que utilices tu propia semilla o que la compres.
Pasos Utilizados Para Sembrar Las Semillas De Tomate.
Paso Nº 1. Escoge Tu Método.
1. Puedes comprar las semillas a un distribuidor confiable.
Una opción es comprarla en un banco de semillas, en una tienda de plantas como un vivero o si algún conocido tiene, pedírselas.
2. Pon A Secar Las Semillas De Un Tomate.
Como antes se mencionó, de un fruto de tomate que tengas en tu hogar puedes obtener tu propia semilla, y luego a partir de ella obtener tu propia planta. Sacale las semillas a un tomate y ponlas a secar para tratar de eliminarle el mayor contenido de humedad posible antes de plantarlas.
3. Elige Una Variedad.
Son miles de variedades de semillas de tomate que existen. La gran mayoría pueden ser clasificadas en 3 categorías que pueden ayudarte a decidir cuál escoger:
-
Tradicionales O Híbridos:
La variedad tradicional son aquellos que no han sido genéticamente reproducidos en diversas generaciones sin haber cruzado especies. Esencialmente, se trata de los tomates puros. La variedad híbrida son los que han resultado del cruce de dos variedades de tomates.
-
Determinados O Indeterminados:
En esta clasificación, las plantas se distinguen por el periodo de tiempo en el cual la planta produce su fruto. Las determinadas los producen durante unas pocas semanas, mientras que las indeterminadas los producen continuamente en la época de crecimiento hasta que el clima se vuelve muy frío.
-
Forma:
Igualmente pueden clasificarse por su forma, pueden ser redondos que son los más populares, beefsteak (los más grandes), los de pulpa (usados para hacer salsas) y los cherry (los más pequeños) que son utilizados más que todo para ensaladas.
Paso Nº 2. Fermenta Tus Propias Semillas De Tomate.
1. Elige Los Tomates De Una Planta Sana.
Asegura que la planta no sea un híbrido pues si utilizas una semilla alterada genéticamente, los resultados pueden no ser los más esperados.
2. Corta A La Mitad Los Tomates Y Vierte El Fruto En Un Recipiente Plástico.
Es mejor que tengas un recipiente con una tapa un poco suelta para que cubra la pulpa. Es probable que aparezca una capa de moho sobre las semillas y esto debes evitarlo, pues este proceso puede que favorezca la aparición de ciertas enfermedades que luego se pasarán a las nuevas generaciones de plantas.
También puedes leer . . . El Mejor Manejo De Las Gallinas Ponedoras Caseras.
3. Debes Etiquetar El Recipiente.
Si fermentas diferentes tipos de semillas, lo mejor es etiquetar los recipientes con toda la información de cada una de las Semillas De Tomate en fermentación. Ubica la tapa sobre el recipiente sin sellarla para hacer que el oxígeno interactúe con la pulpa.
4. Ubica La Pulpa En Un Lugar Cálido, Lejos De La Luz Directa Del Sol.
La propia fermentación no tiene un aroma muy agradable al olfato, así que debes procurar colocarlo en un lugar donde no estorbe.
5. Agita El Recipiente Hasta Que Se Cree Una Capa De Moho Encima De La Superficie.
Por lo general esto tarda unos dos o tres días en aparecer. Debes asegurarte de cosechar las Semillas De Tomate poco después de la formación del moho para que las semillas no lleguen a germinar dentro del recipiente.
6. La Cosecha De Las Semillas.
La cosecha deberás hacerla con guantes, elimina la capa de moho. Es probable que las semillas se hayan ido al fondo del recipiente.
7. Agrega Agua Dentro Del Recipiente Para Suavizar La Mezcla.
Permite que las semillas se asienten en el fondo y sigue enjuagando todo lo que no sea semillas. No pierdas semillas haciendo este procedimiento.
8. Junta Todas Las Semillas Con La Ayuda De Un Colador Y Lávalas Bien.
9. Riega Las Semillas De Tomate Sobre Una Superficie Que No Esté Pegajosa Para Que Se Puedan Secar Durante Unos Días.
Lo más ideal es un plato de cerámica, una ventana o cualquier otra cosa superficie que puedas utilizar. Si utilizas tela o papel, luego remover las semillas cuando estén ya secas te será más complicado. Cuando estén secas, guárdalas en una bolsa plástica hasta que las vayas a plantar. Escribe sobre la bolsa el tipo de semillas que son.
10. Guarda Las Semillas En Un Lugar Oscuro Y Fresco.
Asimismo puedes ponerlas en un recipiente ventilado como dentro de una heladera para simular un poco el clima invernal, pero cuidado, no pienses en ponerlas en la nevera porque las dañaras.
Paso Nº 3. Planta tus semillas.
1. Empieza Con Las Plantas Entre Seis Y Ocho Semanas Antes De La Última Helada.
Prepara la planta antes de trasplantarla, empieza con plantines mientras en la parte exterior sigue fresco, pues en primavera las temperaturas frescas pueden detener el crecimiento o incluso matar las plantas. Comienza con las semillas bajo techo para que el crecimiento esté asegurado.
2. Invierte Comprando Pequeñas Macetas Para Crear Tus Plantines.
Las macetas puedes comprarlas en cualquier vivero.
3. Las Macetas Llénalas Con Una Mezcla De Tierra Abonada.
4. Sumerge La Semilla En Tierra.
Sumerge o entierra entre dos y tres semillas de tomate a una profundidad de un centímetro y luego cúbrela con un poco de tierra.
5. Deja Los Contenedores En Una Habitación Con Una Temperatura De Aproximadamente 20° C.
Cuando las Semillas De Tomate germinen, colócalas al sol o abajo de luces de crecimiento.
6. Riega Con Un Poco De Agua Las Semillas En Los Primeros siete A diez Días.
Cuando las semillas empiecen a brotar, podrás comenzar a regarlas con menor frecuencia, pues muchas plantas pueden morir si tienen demasiada agua ya que pudre las raíces. Así que riégalas moderadamente después que broten.
7. Examina Las Macetas A Diario.
Cuando las plantas hayan roto la tierra, será rápido su crecimiento.
Paso Nº 4. Trasplantar.
1. Comprueba Que Tus Plantas Hayan Crecido Al Menos 20 Cm.
2. Prepara Las Plantas.
Aproximadamente una semana antes de trasplantarlas necesitaras acostumbrar progresivamente a la planta a las temperaturas que se manejan fuera de la meseta. Inicialmente durante unas pocas horas, coloca las plantas en un lugar donde tengan sombra para que esta pueda guarecerse.
3. Prepara Muy Bien El Sector Del Jardín Donde Las Plantarás.
Para plantarlas, lo mejor es un suelo que sea bien drenado y con bastante material orgánico. Puedes agregar una turba al suelo para mejorar el drenaje. A pesar de que la turba puede absorber entre diez y veinte veces su peso en agua, es considerada como nociva sobre el medio ambiente además que es un poco costosa.
Si te preocupa los efectos de la turba, es mejor que intentes hacer un cantero elevado con dos tablas de madera de cedro, pues este no se pudre con el pasar del tiempo.
4. Examina El Nivel De PH Del Suelo.
El pH óptimo para el desarrollo del rubro en estudio es entre 6 y 7. Si el nivel de pH es menor a 6, enriquece el suelo usando compost ácido o abono orgánico. Si el pH está en más de 7, mezcla un poco de sulfuro granulado y reducirás el nivel de pH.
5. Abre Un Hoyo De Unos 60 Cm De Profundidad.
Este hoyo debe ser lo bastantemente profundo como para que logres plantar tus plantines de una forma tal que solo un cuarto de la planta salga de la tierra. Agrega una capa de compost al final del fondo del hoyo para que esta planta tenga energía extra y así moderarás el efecto que tendrá la planta al ser trasplantada.
También te recomendamos que leas . . . Aprende A Crear Un Banco De Semillas Ecológicas En Tu Hogar
6. Saca Con Cuidado Las Plantas De Los Recipientes Y Ubícalas En El Suelo.
Debes intentar mantener intactas las raíces al trasplantar. Coloca la planta a una altura que la tierra pueda llegar hasta las primeras hojas de la planta. Golpea un poco apelmazando la tierra alrededor de la planta.
7. Opcionalmente Puedes Fertilizar La Tierra Con Comida Para Peces, Abono Para Pollos, Mezclas Bajas En Nitrógeno Y Altas En Fósforo, Riega Lo Suficiente.
Puedes repetir este proceso de fertilización una vez al año.
8. Ubica Guías Junto A Las Plantas.
Las guías las ayudaran a crecer fácilmente y será más fácil que coseches los tomates. Ten cuidado de dañar las raíces al colocar las guías.
Paso Nº 5. El Cuidado De Las Plantas De Tomate.
1. Riega Las Plantas Periódicamente.
2. Quita Los Retoños De Las Plantas.
Si deseas generar un óptimo crecimiento, elimina los retoños de la planta para que su energía no se diversifique. Más que todo los retoños los encontrarás sobre el tallo principal. Puedes dejar solo algunos.
3. La Cosecha De La Fruta Debe Ser En El Momento Más Alto.
Más o menos unos 60 días luego de ser trasplantada, los tomates podrán ser cosechados. Una vez que las plantas empiecen a madurar, debes controlarlas a diario. Para cosecharlos, en vez de jalar el tomate, es mejor que lo gires suavemente.
También te recomendamos que leas . . . 10 Verduras Y Las Mejores Frutas Para Sembrar En Invierno.