La Importancia De Añadir Fertilizantes Nitrogenados A los Cultivos

Los Fertilizantes Nitrogenados son aquellos a los que se le incorpora nitrógeno o compuestos derivados de éste. Este tipo de fertilizante, básicamente aporta nitrógeno, aunque en muchos casos contienen otros elementos como calcio, azufre, magnesio, fósforo, e incluso microelementos como el hierro, cobre, zinc, manganeso, boro y molibdeno.

Las únicas fuentes de nitrógeno son la materia orgánica y el nitrógeno atmosférico. Del nitrógeno total del suelo, el 90-95% se encuentra en forma orgánica. Esta forma de nitrógeno ingresa al suelo por restos en descomposición, de animales o vegetales. El nitrógeno orgánico no puede ser absorbido directamente por las plantas; es decir que no es asimilable por éstas; por lo que debe sufrir un proceso de transformación denominado mineralización.

Las plantas sí están en capacidad de asimilar el nitrógeno en forma mineral, llamado también nitrógeno inorgánico.  A su vez, el nitrógeno inorgánico, se encuentra en forma de amonio, NH4 +, y de nitrato, NO3 –; es por esto que encontramos en el mercado fertilizantes con estas formas de nitrógeno. El nitrógeno puede suministrarse como las formas antes mencionadas y también como urea en la forma amídica (NH2), que incurre en rápidas reacciones en el suelo cambiando a amonio.

El mantenimiento del balance nutricional del suelo puede lograrse a través de la mezcla de las diferentes formas de nitrógeno, lo cual puede influir positivamente en su conservación y la del ambiente, propiciando un manejo agrícola sostenible.

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¡La importancia de los fertilizantes nitrogenados!

Los fertilizantes nitrogenados son de suma importancia en la fertilización de las plantas, ya que su principal componente es el nitrógeno, elemento esencial en el desarrollo de las plantas, por formar parte de las proteínas, enzimas, y de la molécula de clorofila. Por todo esto, el nitrógeno es indispensable en la síntesis de proteínas y vital para lograr la fotosíntesis.

Entre sus funciones también destaca el aceleramiento de la división celular, y elongación de las raíces. He aquí la importancia de añadir Fertilizantes Nitrogenados a los cultivos. Sin éstos, las plantas no pueden completar procesos metabólicos indispensables para su desarrollo.

Existen 2 formas de nitrógeno en el suelo

1. Nitrógeno orgánico: Son las proteínas, aminoácidos, azúcares, lignina y complejos húmicos.
2. Nitrógeno Inorgánico: Compuesto por las moléculas de Amonio (nitrógeno amoniacal: (NH4+), nitrato (NO3-), nitrito (NO2-), óxido de nitrógeno (NO), óxido nitroso (N2O), nitrógeno atmosférico (N2).

Síntomas de deficiencia de nitrógeno en las plantas

El principal síntoma en la planta es una clorosis total de las hojas o amarillamiento, que se manifiesta primero en las hojas más viejas y a medida que se va incrementando el déficit, se va manifestando en las hojas más jóvenes. Esto ocurre porque el nitrógeno es un elemento móvil, por lo que puede desplazarse a aquellas partes de la planta dónde sea requerido.

Una clorosis en las hojas, es una clara  evidencia de que el proceso de fotosíntesis está siendo afectado.  Y además, debido al importantísimo papel que desempeña el nitrógeno en la síntesis de proteínas y enzimas, la deficiencia de este elemento suprime el funcionamiento de muchos procesos metabólicos de la planta, por lo que  se manifiesta en poco desarrollo de la misma.

Características del amonio y el nitrato

Nitrato (NO3)

• El nitrato es móvil y muy soluble en la solución del suelo
• Por ser tan soluble y móvil, tiende a perderse por lavado
• El nitrógeno, además de perderse por lavado, también puede perderse por desnitrificación. Proceso donde éste es convertido en óxidos de nitrógeno y nitrógeno elemental, que luego se pierde por volatilización. La desnitrificación ocurre a pH´s ácidos y en suelos con poco drenaje o inundados.

Amonio (NH4+)

• Es retenido fácilmente por las arcillas en forma de amoniaco
• Es un elemento poco móvil en el suelo y las pérdidas se producen por volatilización cuando el amonio (NH4+) se transforma en amoniaco (NH3).
• La volatilización ocurre cuando es aplicado en la superficie del suelo sin ser incorporado a las capas profundas, o en suelos alcalinos o calcáreos.

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¿Cómo se puede perder el nitrógeno en el suelo?

Lamentablemente, en todo este complejo proceso  del nitrógeno, existen algunas rutas por las cuales se pierde este nutriente. Estas rutas son las siguientes:

• Lavado Superficial

Luego de la aplicación del fertilizante, la erosión generada por precipitación o riego puede cambiar su ubicación original y generar acumulación en las partes más bajas del terreno, como en las afueras del campo de cultivo, con efectos muy negativos para los cuerpos de agua adyacentes.

• Volatilización

Las transformaciones de fertilizantes amoniacales, del amonio al amoniaco (gas) que ocurren en los primeros 5-6 centímetros de la capa superficial de suelo, pueden desprender el gas amoniaco a la atmósfera generando pérdida del fertilizante aplicado con finalidad de suplir la planta con nitrógeno. Este proceso ocurre con mayor intensidad cuando es aplicada la urea. Investigaciones han demostrados pérdidas hasta de un 80% en aplicaciones superficiales de urea.

•  Lixiviación

El nitrato por su carga negativa puede no quedarse ligado en los coloides del suelo, pero se mueve libremente. A través del proceso natural de nitrificación, el amonio se transforma en nitrato, que sumado a los fertilizantes de origen nítrico, conllevan el mayor riesgo de pérdidas por lixiviación o salida del sistema agrícola por la vía de las capas freáticas dentro de todos los nutrientes esenciales.

• Desnitrificación

Los nitratos del suelo también sufren otro tipo de pérdida que ocurre entre 60% de capacidad de campo y la saturación del suelo. En este rango, el nitrato se transforma de NO3 para N2O y N2 y estas formas gaseosas se pierden a la atmósfera. Neto et al, 2000, indica que hasta un 30% de abono nitrogenado se puede perder por desnitrificación en cultivos de temporada.

Como forma de evitar las pérdidas mencionadas, se han diseñado formas de nitrógeno que hacen más eficiente el uso de este recurso. Entre las ventajas de dichos productos, destacan los beneficios medioambientales, la disminución de emisiones de gases con efecto invernadero y el control en el exceso de la percolación.

Tipos de nitrógeno según su modo de acción

• Nitrógenos de liberación lenta y controlada

Son fertilizantes convencionales que se presentan en forma de gránulos envueltos en una membrana semipermeable que está constituida por una sustancia insoluble o de baja solubilidad en agua. La disolución del fertilizante se produce lentamente conforme el agua va atravesando el recubrimiento. Los fertilizantes de liberación lenta y controlada son de gran impacto, al mejorar el suministro de nitrógeno y reducir las pérdidas de este elemento al medio ambiente, sin embargo, una de sus desventajas es que tienen un costo relativamente alto en comparación con los fertilizantes convencionales.

• Nitrógenos estabilizados

Contienen aditivos estabilizadores de nitrógeno. Este aditivo es una substancia que alarga el tiempo del nitrógeno en las formas urea-N o nitrógeno amoniacal. Por su parte los nitrógenos estabilizados, se presentan como una excelente alternativa para los productores debido a la buena relación costo-beneficio. Estos productos, gracias al desarrollo de algunas moléculas que ya llevan varios años en el mercado, han logrado crear compuestos no tóxicos, estables en su fabricación y almacenamiento con excelentes resultados en campo.

En la nutrición de los cultivos, es fundamental la aplicación de Fertilizantes Nitrogenados, ya que, como dijimos anteriormente, el nitrógeno es un elemento esencial en el desarrollo de las plantas por formar parte de las proteínas, enzimas, y de la molécula de clorofila, por esto es tan fundamental para lograr la fotosíntesis. La ausencia o carencia de nitrógeno en las plantas, trae como consecuencia, problemas en el desarrollo de éstas; por lo que este importante elemento debe ser añadido mediante fertilizantes que lo contengan.

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